The legend of kings empezó siendo una pequeña guild, creada por un grupo de amigos para levear, jugar juntos, y en definitiva hacer más divertida la experiencia en azeroth. Poco a poco, ese grupo de amigos fue creciendo, gracias al buen rollo que se traían los integrantes. Tras unos mesesillos de nada, la guild se había convertido en una gran familia, donde unos se ayudaban, otros se pegaban en cloacas de Dalaran, o simplemente hacían las diarias que permitían a muchos obtener algo de equipo para iniciarse en el PvE.
Hoy en día, estos jugadores ya se pasean por las iccs, como si de diarias se trataran, y ayudan a los lows a que sigan los mismos pasos, y puedan disfrutar de las diferentes raids que se montan semanalmente.
Más que una guild